sábado, 13 de diciembre de 2008

Después de la separación

Después de la tormenta viene siempre la calma y por muy oscuras que estén las cosas, esa sensación de vacío en el estómago, o ese dolor inexplicable en el corazón, esa pesadez y cansancio en todo el cuerpo, y esa tristeza y desasosiego siempre tienen un final. Con el tiempo la vida vuelve a cobrar sentido y todo queda como un mal sueño.

¿Pero cómo hacer que esa etapa de duelo sea lo más breve posible?.. Siguiendo atentamente nuestros consejos. Si bien no son ningún brebaje mágico, sí que te ayudarán a salir pronto de esta crisis como una persona mucho más fuerte que ahora.

1. Mantén una actitud positiva
Aunque la separación se esté haciendo insoportable, ten en cuenta que le acabarás olvidando. Así que ahuyenta los malos pensamientos de tu cabeza tipo: “jamás le olvidaré”, “nunca podré vivir sin él” o “nunca me volveré a enamorar”. Se positiva y piensa que el tiempo lo cura todo, aunque ahora te parezca imposible.

2. Evita los pensamientos destructivos
Pensar qué estará haciendo él o con quién estará sólo te autodestruirá. Tampoco te mortifiques con ideas como “si hubiera hecho esto...", "si hubiera dicho aquello…". Culparse no conduce a nada. Las razones por las que se rompe una pareja son muy complejas y siempre suele haber más de una causa. Piensa sólo en ti, en tú futuro... ya no hay marcha atrás.

Si la ruptura es reciente, pero definitiva, el tener contacto con él sólo te hará daño. No te engañes diciéndote que le quieres ver para conservar una buena amistad.


3. No le llames
No le llames ni frecuentes lo mismos lugares que él para encontrártelo. Si la ruptura es reciente, pero definitiva, el tener contacto con él sólo te hará daño. No te engañes diciéndote que le quieres ver para conservar una buena amistad. Ésta es posible pero requiere que pase el tiempo suficiente para que las heridas cicatricen.

4. Habla con alguien
Tus amigos y familiares pueden convertirse en el pilar sobre el que apoyarte para superar estos duros momentos. Pero nunca te dejes llevar por lo que te dicen, eres tú quien ha de tomar tus propias decisiones. Simplemente que se conviertan en tu pañuelo de lágrimas. Compartir con alguien los sentimientos de tristeza o depresión ayuda a aliviar el dolor.

5. Compórtate con normalidad
Nada de volverse loca y empezar a salir como una desesperada. Cuando frenes un poquito este ritmo, sólo conseguirás deprimirte. Pero tampoco te encierres en casa a llorar, si no te relacionas con la gente te meterás en un círculo vicioso. Ten en cuenta que el trastorno de la depresión funciona como una espiral: “no tengo ganas de hacer nada, con lo cual me tumbo y me deprimo más, con lo que tengo aún menos ganas de hacer nada, con lo cual....”. Sé frugal, lo mucho cansa y lo poco aburre. Sal lo que tengas que salir, pero siempre manteniendo la calma.

6. Aprovecha para hacer lo que te gusta
Puedes aprovechar para iniciar nuevos proyectos o hacer nuevas cosas que con él no podías, pero que siempre deseaste. Desde salir con tus amigas, esas que él no podía ni ver, hasta hacer cosas que nunca te atreviste como viajar a la Polinesia, apuntarte a un cursillo de buceo o irte a trabajar al extranjero. Si estas actividades son en grupo mejor, así conocerás gente nueva. Eso sí, no te apuntes a cosas sólo por pasar el tiempo si no te gustan, sólo conseguirás aburrirte y entrar en un estado de apatía hacia la vida. Busca cosas interesantes, ¡seguro que tienes algún deseo oculto que cumplir!
Buscar desesperadamente a alguien que sustituya a tu ex es un gran error. Piensa que en este momento eres muy vulnerable y desquitarse cada día con uno acabará haciéndote más daño.



7. No busques desesperadamente un sustituto
Disfruta de tu libertad. Olvídate eso de “a rey muerto, rey puesto”. Buscar desesperadamente a alguien que sustituya a tu ex es un gran error. Piensa que en este momento eres muy vulnerable y desquitarse cada día con uno acabará haciéndote más daño. Puede ser una buena etapa para conocer gente nueva, interesante, con la que no tengas que adquirir ningún tipo de compromiso. Te puedes permitir el lujo de analizar para elegir mejor... esta vez. Aunque si conoces a alguien que te ilusione, no tengas miedo y lánzate, no todas las relaciones tienen por qué salir mal.

8. Come sano, haz ejercicio y descansa
Quizás te sonará raro, pero llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio y dormir bien te ayudará a enfrentar trastornos como ansiedad, variaciones en tu estado de ánimo o depresión. Beber y comer demasiado y llevar una vida muy sedentaria, aumenta la ansiedad, y no alimentarse bien o no descansar las horas suficientes incrementa la apatía.




Lo que hoy siento, mañana pertenecerá a mi pasado y ya no me importara, pero lo que sentire mañana habrá dependido de cómo fui hoy.......

Por eso no mires hacia atrás solo importa el hoy y el mañana.


erar una ruptura sentimental
Superar una ruptura amorosa requiere tiempo, en algunos casos incluso años. El trance por el que se pasa es muy doloroso pero, por más difícil que parezca, una vez que se haya superado el dolor, el vacío y el desconcierto inicial, se podrá iniciar una nueva etapa.

1. ¿Qué suele ocurrir cuando termina una relación?
2. ¿Cómo empezar una nueva etapa?
3. Claves para enfrentarse a las separación

1. ¿Qué suele ocurrir cuando termina una relación?





Tristeza.Cuando nos deja quien amamos nos envuelve una profunda tristeza que debemos superar
Cuando una relación amorosa se acaba, se suelen decir frases del tipo "podemos ser amigos", "tenemos que seguir viéndonos". Sin embargo, no todas las separaciones son iguales.

Superar el mal trago de una ruptura es más fácil cuando la relación se rompe amistosamente con la sensación de alivio y el convencimiento mutuo de que con el tiempo no hubiera funcionado.

Sin embargo, cuando la decisión de romper la relación recae en uno de los dos, el otro experimenta una serie de reacciones que van desde la incredulidad, la tristeza hasta la rabia o el odio por la persona que le ha hecho daño.

Tras la ruptura pasamos por momentos y etapas diferentes:

- Al principio no acabamos de creérnoslo, estamos aturdidos y no dejamos de pensar en ello. En estos casos conviene hablar con amigos, familiares... Es la mejor forma de asimilarlo y de reponernos.

- Después pasamos por una etapa en la que nos invade la tristeza: lamentos, culpa, dolor, desesperación... En esta fase nos atormentamos pensando y creyendo que nunca vamos a estar bien, que no lo vamos a superar, etc.

-Cuando pasa algún tiempo se suele pasar por una fase de descontrol: salir, divertirse, cambiar de imagen, de entorno... Nos invade una sensación de libertad y queremos recuperar el tiempo, romper con todo.

- Por último se llega a la etapa final en la que se suele alcanzar más serenidad, queremos recuperar la felicidad: Aprender a disfrutar de nuestra compañía y de la de los demás, y descubrir las ventajas de estar sin pareja.




2. ¿Cómo empezar una nueva etapa?



Terminar una relación nunca es agradable pero, saber enfrentarse a la nueva etapa sin culpa ni rencor nos va a permitir volver a empezar.

Conviene evitar recrearse amargamente en lo que hubiera podido ser y no fue, y empezar a reconstruir nuestra vida con optimismo, autonomía y libertad. Y para todo ello, es fundamental enfrentarse de verdad al dolor y asumir los propios sentimientos.

Es muy importante tener en cuenta que no se debe pretender superarlo todo en dos días. Atravesar tu dolor con calma y paciencia te permitirá quedarte con lo mejor de la relación.

La distancia y el tiempo son necesarios en muchos casos para comprender mejora las causas de la separación y hallar fuerzas para superarla.




3. Claves para enfrentarse a las separación



- Evitar la dependencia. Lo que hay que evitar a toda costa es la dependencia, cuando ya no hay una relación amorosa. Es decir, intentar alargar el lazo con la esperanza de que todo vuelva a ser como antes, cuando ya nos han expresado el deseo de separase de nosotros.

La tristeza es el sentimiento que más nos paraliza en una ruptura sentimental. Todo nos recuerda a esa persona: lugares, situaciones, canciones... Nuestros planes, deseos y sueños se han ido con nuestra pareja y eso nos llena de inseguridad y tristeza con respecto al futuro.

Nos preguntamos si alguna vez encontraremos a alguien con quien compartir nuestra vida o si estaremos solos para siempre...

El primer paso para superar el dolor será aceptar que estamos tristes y permitirnoslo. Por consiguiente, si tienes ganas de llorar hazlo, desahógate y exterioriza todo lo que puedas la pena que llevas dentro.

No olvides que lo peor que puedes hacer es reprimir las emociones. Sin embargo, no te permitas caer en una depresión o en la amargura. Evita pensamientos del tipo: "sin él o ella nada merece la pena", "nunca lo superaré".

- Expresa tu enfado. Otra forma de exteriorizar lo que sentimos en ese momento es visualizar a nuestra ex pareja sentada frente a nosotros y expresarle nuestro enfado.

- Escribe una carta y luego quémala. También puedes escribirle una carta, explicándole todo el daño que te ha hecho y lo enfadado/a que estás. Una vez te hayas desahogado, quema la carta ya que, el simple hecho de contemplar tu enfado convertido en humo te ayudará a sentirte mejor.

- Escribe un diario y libérate. Una manera de saber como nos sentimos es escribir un diario. En él podremos liberar nuestros sentimientos y pensamientos sobre la ruptura, nuestra nueva situación... Escribir algo cada día te ayudará a comprenderte y te hará sentir mejor al instante.

- Sé positiva/o. Trata de ver el lado positivo y repítete: saldré adelante. Sé consciente de que puedes conseguirlo.

- No te castigues. Es posible que no puedas evitar torturarte pensando que todo habría sido distinto si tú no hubieras trabajado tanto, si hubieras cuidado más tu aspecto, si hubieras sido más cariñoso/a....Pero no puedes cambiar el pasado, así que no te castigues con ese tipo de pensamientos y pon toda tu energía en el presente.

Si fuíste tú quien puso fin a la relación o propiciaste la ruptura no te sientas culpable y asume tu decisión.